Sistema inmunitario y cáncer de mama: el tratamiento no aumenta el riesgo de Covid-19

Los fármacos contra el cáncer capaces de debilitar las defensas del organismo, no son más propensos a aumentar el riesgo de infección o muerte por Covid-19. En relación a las terapias contra el cáncer de mama que no socavan el sistema inmunitario. Según un nuevo estudio publicado en la revista ‘JCO Global Oncology’.

Los investigadores afirman que los resultados desafían las preocupaciones iniciales de que tales tratamientos, que envenenan las células cancerosas, eran demasiado peligrosos para continuar durante la pandemia.

Este estudio, dirigido por investigadores de NYU Langone Health y su Centro Oncológico Perlmutter, en Estados Unidos, demostró que sólo el 2% contrajeron el virus. En él participaron más de 3.000 mujeres tratadas por cáncer de mama en el momento álgido de la pandemia en la ciudad de Nueva York. De este grupo, 10 murieron a causa del COVID-19. Una cifra que, según los autores del estudio, es baja y esperada para este grupo de edad, independientemente del cáncer.

Las que recibían quimioterapia citotóxica, o que mata las células, corrían aproximadamente el mismo riesgo de infección por coronavirus que las que tomaban otras clases de fármacos. Con un impacto mínimo en las defensas del sistema inmunitario.

«Nuestros resultados demuestran que las pacientes pueden recibir con seguridad la terapia contra el cáncer de mama, incluida la quimioterapia, durante la pandemia». Afirma el investigador principal del estudio y oncólogo médico del Perlmutter Cancer Center, Douglas Marks.

«Mientras las pacientes sigan tomando precauciones razonables, como el uso de mascarillas y el distanciamiento social, deberían sentirse seguras de continuar el plan de tratamiento. El cual han elegido junto con sus médicos», añade la investigadora principal del estudio y oncóloga médica del centro oncológico, Sylvia Adams.

Al inicio de la pandemia de coronavirus en la primavera de 2020, la falta de información sobre los factores de riesgo de infección por Covid-19 para estas pacientes provocó retrasos en el tratamiento. Según los autores del estudio, muchos médicos estaban especialmente preocupados por la administración de regímenes de quimioterapia estándar. Lo que podría hacer a los pacientes más vulnerables al virus. En consecuencia, algunos retrasaron o incluso evitaron el tratamiento.

El nuevo estudio, presentado en línea el 4 de junio en la reunión anual de la Sociedad Americana de Oncología Clínica, se cree que es la primera investigación a gran escala que evalúa directamente si las terapias contra el cáncer de mama afectan al riesgo de infección y muerte por coronavirus, según Adams.

Desarrollo del estudio

Para el estudio, los investigadores revisaron los registros médicos de las pacientes con cáncer de mama que recibieron quimioterapia u otras terapias farmacológicas. En fechas comprendidas entre febrero y mayo de 2020, en el Centro Oncológico Perlmutter de la ciudad de Nueva York y Long Island.

A continuación, los investigadores analizaron información que incluía los resultados de las pruebas COVID-19, la extensión del cáncer, la presencia de otras enfermedades y la supervivencia.

Entre los resultados del estudio, el riesgo de infección por coronavirus entre las pacientes con cáncer de mama que recibieron quimioterapia no fue mayor que el riesgo de las que recibieron tratamientos que no debían dificultar su sistema inmunitario. El tratamiento tampoco aumentó el riesgo de muerte por COVID-19.

Además, el estudio demostró que los pacientes de edad avanzada y con sobrepeso seguían teniendo un mayor riesgo de morir a causa de la infección por coronavirus. Un hallazgo que coincide con investigaciones anteriores sobre la mortalidad por COVID-19, según los investigadores.

Adams, también directora del Centro de Cáncer de Mama de Perlmutter, advierte que la pandemia de coronavirus está evolucionando rápidamente. Y que deben mantenerse las precauciones contra la infección en los centros oncológicos.

Vea la versión original en tododisca.com

Historias Le Cadó: María Fonfría

María Fonfría es doctora en la especialidad de oncología en el Hospital Provincial de Castellón y fue la directora del segundo proyecto de investigación financiado por la Fundación Le Cadó. Con este estudio ‘Descifrando el genoma humano’ se buscaba localizar qué otros genes, más allá de los comunes, pueden alterar las posibilidades de sufrir esta enfermedad. Este análisis es muy importante porque se estima que entre el 5-10% de los casos de cáncer de mama tienen origen hereditario y se quería identificar una alteración que explicara el aumento de casos en un mismo núcleo familiar.

“La investigación es clave para que cada vez más pacientes puedan decir que han superado la enfermedad”

Después de conocer la valiosa labor de investigación en cáncer de mama de la Fundación con otros hospitales, María Fonfría cuenta que surgió la oportunidad de colaborar. Así, crearon este proyecto para profundizar en la causa hereditaria de la enfermedad con pacientes de la provincia de Castellón. Esta colaboración con Le Cadó hizo posible esta investigación porque la financiaron de forma íntegra, por ejemplo, en la VI Marcha de Castellón contra el cáncer de mama destinaron un cheque de 15.000 euros.

El cáncer de mama es muy frecuente, pero María reconoce que se han producido avances importantes en los últimos años y cada vez más pacientes pueden decir que han superado la enfermedad. Con este tipo de investigaciones se quiere conseguir que poco a poco mejore la esperanza de vida y el número de pacientes que se curan siga siendo mayor. Alejada de la investigación, esta experiencia ha llevado a María a conocer a gente muy implicada y comprometida, siempre dispuesta a conseguir grandes cosas de forma altruista.

“Un simple gesto con la Fundación supondrá una ayuda directa en la tan necesaria investigación gestionada por un equipo con una gran calidad humana dispuesto siempre a aportar”

Para María Fonfría, esto es una inspiración para que todos podamos aportar en la medida de lo posible nuestro granito de arena contra el cáncer de mama. Un simple gesto con la Fundación supondrá una ayuda directa en la tan necesaria investigación gestionada por un equipo con una gran calidad humana dispuesto siempre a aportar. Todo ello permitirá que se vaya conociendo mucho mejor esta enfermedad y proporcionará más herramientas para luchar contra ella.

Historias Le Cadó: Francisco Pareja

Como presidente del Colegio Oficial de Enfermería de Castellón (COECS), Francisco Pareja colabora con la Fundación para organizar la Marcha contra el cáncer de mama de Castellón que se celebra anualmente. En 2019 en su edición ‘Un paseo por la vida’ la Fundación recaudó dos cheques por un valor total de 30.000 euros destinados a la investigación.

La naturaleza del COECS le impulsó a colaborar porque la Fundación está encaminada mayormente a la investigación del cáncer de mama. La sensibilidad del Colegio frente a esta enfermedad es máxima porque es mayoritariamente femenina y el presidente recalca que Le Cadó está encabezada por una enfermera. Además, ambas entidades comparten objetivos claros como es la prevención de las enfermedades y la lucha por lograr su curación. Nuestro protagonista considera que la importancia de ayudar en la lucha contra el cáncer de mama se debe a que es una enfermedad “pandémica” entre las mujeres, que altera sustancialmente su forma de vida y bienestar.

Desde el COESCS, como profesionales del ámbito sanitario, son conscientes de que se debe prestar toda la atención necesaria, ya no para erradicar, sino modificar el pronóstico de esta dolencia. Para Francisco Pareja esta experiencia le enriquece, pues sabe que luchan contra una patología y ayudan en la investigación para cambiar poco a poco la percepción social y la manera de afrontarla a nivel profesional. El COESCS apela a la solidaridad frente a las neoplasias, ya que es vital para alcanzar la plenitud sanitaria y poder ofrecer buena calidad asistencial y un mayor bienestar para los enfermos. La manera de alcanzar estos objetivos es ayudando a la Fundación Le Cadó y unir apoyos para colaborar en proyectos de investigación.

Un nuevo biosensor ayuda al diagnóstico precoz de cáncer de mama

CIBER/DICYT Un equipo de investigadores españoles, coordinados por el profesor de la Universitat Politècnica de València (UPV) y director científico del CIBER de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina, Ramón Martínez Máñez, y la oncóloga valenciana, co-coordinadora del Grupo de Investigación de Biología en Cáncer de Mama del Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de València, Ana Lluch, también perteneciente al CIBER de Cáncer (CIBERONC), ha desarrollado, a nivel de laboratorio, un prototipo de un nuevo biosensor para ayudar a detectar el cáncer de mama en sus fases más tempranas. Su trabajo ha sido publicado en la revista ACS Sensors.

Según los últimos datos recogidos por el Sistema Europeo de Información del Cáncer (ECIS, por sus siglas en inglés), en 2020 se diagnosticaron un total de 34.088 nuevos casos de cáncer de mama en España, siendo este tipo de tumor el más frecuente entre las mujeres en nuestro país.

Actualmente, la mamografía es la técnica estándar más utilizada para el diagnóstico, pero presenta algunas limitaciones, como la exposición a la radiación, y una menor sensibilidad y especificidad en mujeres jóvenes con tejido mamario denso. “Por ello, son necesarias nuevas herramientas de diagnóstico que ayuden a la detección temprana del cáncer de mama. Nuestro biosensor va en esta línea”, explica Ana Luch.

El desarrollo de este prototipo de biosensor para ayudar al diagnóstico se enmarca en el campo de lo que se conoce como biopsia líquida, que a través de un análisis de sangre ayuda a detectar la presencia de cáncer. En este caso, el biosensor mesoporoso desarrollado por el equipo de la UPV e INCLIVA es sencillo de utilizar, de bajo coste y ofrece los resultados en muy poco tiempo –entre 30 y 60 minutos- a partir de una muestra de plasma de la paciente.

El biosensor está compuesto por un nanomaterial –una alúmina nanoporosa- que facilita la detección en plasma de microARN miR-99a-5p asociado al cáncer de mama. Hasta ahora, esto se hace con técnicas complejas y que requieren de mucho tiempo, lo que provoca que no se puedan utilizar como herramienta de diagnóstico en el ámbito clínico.

Martínez Máñez explica cómo funciona el sistema de diagnóstico alternativo en el que trabajan: los nanoporos del biosensor se cargan con un colorante –rodamina B- y se cierran con un oligonucleótido. Al hacerlo interactuar con la muestra de plasma, si no detecta la presencia del microARN, las puertas de los poros siguen cerradas; en cambio, en presencia del miR-99a-5p, esas puertas se abren y se libera el colorante. “El cambio en la liberación del colorante puede correlacionarse con pacientes sanas o con cáncer de mama”, resume Martínez Máñez.

En el desarrollo de este biosensor ha participado también personal del Instituto de Investigación Sanitaria La Fe (IIS La Fe), donde se han realizado los ensayos para la validación de los nuevos biosensores, y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Cáncer (CIBERONC).

“El siguiente paso en nuestro trabajo consistirá en la validación en un mayor grupo de pacientes y seguir trabajando para hacer que el sistema de detección sea todavía más robusto y sencillo de utilizar”, concluyen Juan Miguel Cejalvo, del Grupo de Investigación de Biología en Cáncer de Mama del INCLIVA y Ramón Martínez Máñez.

Vea la versión original en DiCYT

Optoacústica, la innovadora tecnología que mejora el diagnóstico del cáncer de mama

El Centro de Dispositivos y Salud Radiológica (CDRH por sus siglas en inglés) de la Agencia del Medicamento de Estados Unidos (FDA por sus siglas en inglés) ha otorgado la aprobación previa a la comercialización a Seno Medical Instruments de su innovadora tecnología de diagnóstico por imágenes de cáncer de mama que ayuda a los médicos a diferenciar mejor entre lesiones mamarias benignas y malignas.

Concretamente, Breast Imaging System utiliza la tecnología no invasiva de ultrasonido optoacústico para proporcionar información sobre las lesiones mamarias sospechosas en tiempo real.

Además, la nueva tecnología podría mitigar el que al dar a los proveedores de información en tiempo real sobre las masas mamarias sospechosas y una mayor confianza para tomar una mejor decisión en cuanto a la necesidad de biopsias de mama de diagnóstico.

La tecnología combina óptica láser y ultrasonido en escala de grises para proporcionar imágenes de mamas funcionales y anatómicas fusionadas. Las imágenes optoacústicas proporcionan un mapa sanguíneo único dentro y alrededor de las masas mamarias, mientras que el ultrasonido proporciona una imagen anatómica tradicional.

A través de la aparición o ausencia de dos indicadores, el sistema será una herramienta más eficaz para ayudar a los radiólogos a confirmar o descartar la malignidad en comparación con las modalidades tradicionales de diagnóstico por imagen sin exponer a los pacientes a radiaciones ionizantes (rayos X) o agentes de contraste potencialmente dañinos.

Seno también incluye una herramienta de inteligencia artificial para la toma de decisiones del médico para ayudar en la interpretación de las nuevas imágenes que, junto con la capacitación y la certificación, ayudan a los radiólogos a realizar la transición del ultrasonido solo a la OA / US Imaging.

“Estamos encantados de haber alcanzado este hito y estamos ansiosos por hacer avanzar nuestra plataforma tecnológica en Estados Unidos. Nuestro equipo interno y nuestros fieles investigadores y centros de ensayos clínicos han trabajado diligentemente para llevar Imagio al mercado y mejorar la atención a los pacientes y proveedores con las capacidades de diagnóstico precisos y una mejor toma de decisiones de apoyo que nuestra nueva imagen proporciona “, ha señalado Tom Umbel, director ejecutivo de Seno.

Vea la versión original en SaludDigital

Historias Le Cadó: Nati Zafra

Para Nati Zafra, directora del Gimnasio Body Factory Masfit en Castellón, el deporte es vital al igual que para muchas pacientes de cáncer de mama. Junto a su equipo hacen actividades deportivas como zumba o aeróbic en el punto final de la Marcha contra el Cáncer de Castellón con participación de la Fundación Le Cadó.

Tanto a nivel personal como empresarial, Nati siempre es partícipe y le gusta poder colaborar con causas humanitarias. Es por esto que cuando la Fundación le ofreció la oportunidad no lo dudó y espera poder seguir apoyando cada año una causa tan importante para la mujer. Para todo su equipo es una satisfacción aportar su granito de arena a esta lucha respaldada por el gran equipo humano que forman la Fundación.

Este tipo de acciones son cruciales para llamar a la sociedad y visibilizar la enfermedad, incluso confía en que ayudan a movilizar a las instituciones. Estas pueden unirse a la causa y que sus aportaciones se destinen a la investigación de la detección precoz y mejora en los tratamientos. La satisfacción que se siente al acabar el evento, ver la recompensa que reciben los profesionales de la sanidad para seguir investigando es lo que para Nati da sentido a este proyecto. Cuando ve esto siente un gran orgullo de ver el trabajo tan importante que realiza la Fundación y como todas las personas que apoyan la causa miran hacia una misma dirección.

Después de todo el esfuerzo, nuestra protagonista asegura que la sensación de bienestar que genera es inmensa. El día de la Marcha es emotivo e inolvidable porque ves a la gente unida, que se identifican entre ellos, se apoyan y la marea rosa recorre toda una ciudad. Nati reconoce que no tiene palabras para agradecer a la Fundación por esta oportunidad ni para describir cómo se siente en ese momento. Cada año se le saltan las lágrimas de ver como ayuda y le dan las gracias por ello, además de la recompensa emocional siempre salen con unas fuerzas enormes de seguir adelante.

Investigadores españoles desarrollan un nuevo biosensor que ayuda al diagnóstico precoz de cáncer de mama

Un equipo de investigadores españoles ha desarrollado, a nivel de laboratorio, un prototipo de un nuevo biosensor para ayudar a detectar el cáncer de mama en sus fases más tempranas. Su trabajo ha sido publicado en la revista ‘ACS Sensors’. Según los últimos datos recogidos por el Sistema Europeo de Información del Cáncer (ECIS, por sus siglas en inglés), en 2020 se diagnosticaron un total de 34.088 nuevos casos de cáncer de mama en España, siendo este tipo de tumor el más frecuente entre las mujeres en nuestro país.

Actualmente, la mamografía es la técnica estándar más utilizada para el diagnóstico, pero presenta algunas limitaciones, como la exposición a la radiación, y una menor sensibilidad y especificidad en mujeres jóvenes con tejido mamario denso. “Por ello, son necesarias nuevas herramientas de diagnóstico que ayuden a la detección temprana del cáncer de mama. Nuestro biosensor va en esta línea”, explica la investigadora Ana Luch.

El desarrollo de este prototipo de biosensor para ayudar al diagnóstico se enmarca en el campo de lo que se conoce como biopsia líquida, que a través de un análisis de sangre ayuda a detectar la presencia de cáncer. En este caso, el biosensor mesoporoso desarrollado por el equipo de la UPV e INCLIVA es sencillo de utilizar, de bajo coste y ofrece los resultados en muy poco tiempo (entre 30 y 60 minutos) a partir de una muestra de plasma de la paciente.

El biosensor está compuesto por un nanomaterial (una alúmina nanoporosa) que facilita la detección en plasma de microARN miR-99a-5p asociado al cáncer de mama. Hasta ahora, esto se hace con técnicas complejas y que requieren de mucho tiempo, lo que provoca que no se puedan utilizar como herramienta de diagnóstico en el ámbito clínico.

Martínez Máñez explica cómo funciona el sistema de diagnóstico alternativo en el que trabajan: los nanoporos del biosensor se cargan con un colorante (rodamina B) y se cierran con un oligonucleótido. Al hacerlo interactuar con la muestra de plasma, si no detecta la presencia del microARN, las puertas de los poros siguen cerradas; en cambio, en presencia del miR-99a-5p, esas puertas se abren y se libera el colorante. “El cambio en la liberación del colorante puede correlacionarse con pacientes sanas o con cáncer de mama”, resume.

En el desarrollo de este biosensor ha participado también personal del Instituto de Investigación Sanitaria La Fe (IIS La Fe), donde se han realizado los ensayos para la validación de los nuevos biosensores, y el Centro de Investigación Biomédica en Red de Cáncer (CIBERONC).

“El siguiente paso en nuestro trabajo consistirá en la validación en un mayor grupo de pacientes y seguir trabajando para hacer que el sistema de detección sea todavía más robusto y sencillo de utilizar”, concluyen Juan Miguel Cejalvo, del Grupo de Investigación de Biología en Cáncer de Mama del INCLIVA y Ramón Martínez Máñez.

El trabajo ha estado coordinado por el profesor de la Universitat Politècnica de València (UPV) y director científico del CIBER de Bioingeniería, Biomateriales y Nanomedicina, Ramón Martínez Máñez, y la oncóloga valenciana, co-coordinadora del Grupo de Investigación de Biología en Cáncer de Mama del Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de València, Ana Lluch, también perteneciente al CIBER de Cáncer (CIBERONC).

Vea la versión original Infosalus

Historias Le Cadó: Gloria Ribas

Gloria Ribas es bióloga y formó parte del Instituto de Investigación Sanitaria (INCLIVA) del Hospital Clínico de Valencia con el que la Fundación colabora para financiar proyectos de investigación. Ella estuvo inmersa en la primera fase del estudio sobre el cáncer de mama en mujeres menores de 35 años y considera que fue emotivo porque fue la base para varias tesis y una oportunidad para impulsar el trabajo de la Fundación.

“La Fundación es muy activa, cercana y está muy concienciada con el impacto que tiene el cáncer de mama”

Con la investigación como nexo de unión, reconoce que la Fundación es muy activa, cercana y está muy concienciada con el impacto que tiene el cáncer de mama. Tras realizar conjuntamente este estudio, nuestra protagonista agradece a Le Cadó la libertad para desarrollar las investigaciones, la confianza que depositan y el apoyo incondicional. Si algo ha descubierto Gloria en este tiempo es que la Fundación tiene una motivación clara y dedican todo el tiempo posible para conseguirla y luchar contra el cáncer de mama.

Hoy en día existen herramientas terapéuticas eficaces para tratar la mayoría de casos o cronificar los síntomas, pero para la bióloga no es suficiente y queda mucho por hacer. Esta enfermedad es la primera causa de cáncer en mujeres por lo que Gloria defiende que se debe continuar trabajando en la investigación. Gracias a ella se podrían encontrar tratamientos específicos para subtipos menos comunes, reducir los efectos secundarios o evitar ese impacto psicológico de perder un órgano tan significativo para la mujer y su autoestima.

“Con investigación se podrían encontrar tratamientos específicos para subtipos menos comunes o reducir los efectos secundarios”

Más allá del estudio, para Gloria es reconfortante el haber conocido a personas admirables con grandes historias y buenas en su trabajo, que dedican su tiempo libre en conseguir un fin mayor. Además, destaca la honestidad y transparencia porque dedican sus esfuerzos a que lo recaudado llegue a los grupos de investigación. Por ello, empuja a colaborar, ya que hace participes a todos los colaboradores de sus movimientos y no es algo habitual en estas entidades.

 

Historias Le Cadó: Jacobo Ventura

La historia de Jacobo Ventura con la Fundación Le Cadó va más allá de la Dirección General de la empresa de muebles e interiorismo Colección Alexandra referente en España con origen en Burriana. Se convirtió en el diseñador de nuestra camiseta para la Marxa de la Dona de 2020 y trabajó en el concepto del dibujo, pues esperaba conseguir que la gente se implicara y plasmase su mano en la huella para simbolizar la vida y la pureza.

Cuando se le ofreció la posibilidad de diseñar la camiseta exclusiva para esta marcha, que finalmente no se pudo celebrar por la crisis sanitaria, reconoce que fue ilusionante que apostasen por él. Hasta ese momento no había hecho nada relacionado con el cáncer de mama y se sintió orgulloso de la oportunidad y poder aportar a la causa. Para él fue una oportunidad única, no dudó ni un segundo en aceptar la propuesta y dada la causa no paró de pensar hasta dar con el diseño correcto.

Cualquier aportación es positiva para combatir esta enfermedad, así Jacobo Ventura seguirá buscando maneras de ayudar porque le llena hacer cosas bonitas y esta colaboración es una de ellas. Da las gracias a la Fundación por la satisfacción de permitirle hacer algo distinto para un buen fin y que sin duda va a recordar siempre. La unión es el principio para la lucha contra el cáncer de mama, todos sumamos y por esto motiva a hacer cualquier cosa que esté a nuestro alcance para colaborar con la Fundación. Todo ello, por grande o pequeña que sea la aportación te llena mucho personalmente y es lo que al final queda en los recuerdos.

Descubren una mutación que puede ayudar a entender mejor el cáncer de mama

Investigadores del Baylor College of Medicine, del Centro Médico de Texas (Estados Unidos), han seguido la progresión del cáncer de mama en un modelo animal y han descubierto un camino que transforma un tipo de cáncer de crecimiento lento conocido como receptor de estrógeno (ER)+/HER2+ en un tipo ER-/HER2+ de crecimiento rápido que se propaga agresivamente o hace metástasis en otros órganos.

El estudio, que aparece en la revista ‘Proceedings of the National Academy of Sciences’, tiene implicaciones para la terapia del cáncer de mama, ya que sugiere la necesidad de diferenciar los subtipos de cáncer según el camino que siguen las células. Las distintas vías podrían estar relacionadas con un comportamiento diferente del cáncer, lo que debería tenerse en cuenta para planificar el tratamiento de forma adecuada.

“En general, el cáncer de mama ER-/HER2+ es más agresivo que el cáncer de mama ER+/HER2+, pero el tipo ER- también es heterogéneo en su comportamiento”, explica el doctor Jianming Xu, coautor de este estudio y profesor de la Cátedra Gordon Cain de Biología Celular del Departamento de Biología Molecular y Celular de Baylor.

“En algunas pacientes, el cáncer ER-/HER2+ responde a la terapia y no vuelve a aparecer, pero en otras, el cáncer reaparece, crece rápidamente, hace metástasis de forma agresiva en otros órganos y no responde al tratamiento, lo que provoca la muerte –añade–. Sin embargo, no se sabe muy bien qué determina la agresividad del cáncer de mama ER-/HER2+ individual”.

En el estudio actual, Xu y sus colegas investigaron la progresión de las células de cáncer de mama ER+/HER+ y ER-/HER2+ en un modelo de ratón de la enfermedad. “Queríamos saber si la diversidad en el comportamiento del cáncer estaba relacionada con la procedencia de las células”, apunta Xu, miembro del Centro Integral del Cáncer Dan L Duncan de Baylor.

Los investigadores aplicaron un enfoque novedoso estableciendo un modelo de ratón en el que podían seguir las células cancerosas ER+/HER2+ y ER-/HER2+ desde el inicio del crecimiento del tumor hasta su progresión a medida que se convertía en metastásico en animales vivos.

Rastrearon todas las células tumorales que surgían de las células ER+ con una proteína roja fluorescente que pudieron detectar durante toda la progresión. El equipo también comparó la expresión del RE, la proliferación celular y la capacidad metastásica entre los distintos subtipos de células de cáncer de mama que surgieron durante el proceso.

El modelo animal comenzó con partes iguales de células de cáncer de mama ER+/Her2+ y ER-/HER2+. A medida que el cáncer crecía, las células ER-/HER2, que proliferaban rápidamente pero hacían poca metástasis, sólo daban lugar a más células ER-/HER2+ con un comportamiento similar.

Por otro lado, aunque las células ER+/HER2+ produjeron en su mayoría células ER+/HER2+ de crecimiento lento, algunas células cancerosas ER+/HER2+ generaron células que habían perdido su ER. Esta nueva población de células cancerosas ER-/HER2+ creció rápidamente y se extendió a otros tejidos de forma agresiva.

“Nuestro estudio propone que las células cancerosas ER-/HER2+ de crecimiento rápido pueden dividirse en dos subtipos, uno que tiene un origen ER+, crece rápidamente y hace metástasis de forma agresiva, y otro que tiene un origen ER- y también crece rápidamente pero tiene un comportamiento metastásico menos agresivo”, señala Xu.

Según apunta, “actualmente todos los cánceres de mama ER-/HER2+ se tratan de la misma manera y producen respuestas diversas. Nuestros hallazgos sugieren que podrían ser necesarios tratamientos diferentes. Si las observaciones en nuestro modelo animal pueden validarse en humanos, anticiparíamos que el cáncer ER-/HER2+ con un origen ER+ sería muy agresivo y debería tratarse en consecuencia –resalta–, mientras que el cáncer ER-/HER2+ que se originó a partir de células ER- tendería a ser menos metastásico y, por tanto, requeriría un tratamiento diferente”.

El equipo también investigó por qué las células cancerosas ER-/HER2+ derivadas de células ER+ habían perdido el marcador ER y qué podría haber desencadenado su agresivo comportamiento metastásico. “Comparamos las células cancerosas ER-/HER2+ de origen ER+, el tipo más agresivo, con las células normales de la glándula mamaria ER+ de donde se habían originado estas células cancerosas, a nivel de ADN”, recuerda Xu.

“Descubrimos que el tipo de cáncer más agresivo, pero no el otro, tenía cambios en el ADN que llevaban a cerrar la expresión del RE, lo que proporcionaba una explicación de por qué las células habían perdido su RE”, añade.

Xu y sus colegas también trataron de explicar por qué el origen de las células cancerosas ER-/HER2+ marcaría una diferencia en el comportamiento metastásico de las células. Descubrieron que la activación de una enzima clave llamada MAP quinasa era diferente entre las células ER-/HER2+ más agresivas y las menos agresivas, y proponen que esta diferencia proporciona una respuesta a la naturaleza de su comportamiento.

“Estos hallazgos nos animan a investigar si los descubrimientos que hemos hecho en un modelo animal también se dan en pacientes con cáncer de mama –señala el doctor Bert O’Malley, co-corresponsal, profesor de biología molecular y celular y canciller de Baylor y miembro del Centro Oncológico Integral Dan L Duncan–. Nuestro estudio apoya el concepto de que la progresión del cáncer implica cambios dinámicos en la población de células cancerosas. Necesitamos entender estos cambios para poder diseñar terapias que jueguen con ellos para mejorar los resultados de esta devastadora enfermedad”.

Vea el original en El Periódico de Aragón