tratamiento cáncer de mama

El nuevo medicamento contra el cáncer de mama que reduce un tratamiento a 5 minutos

El Ministerio de Sanidad ha dado luz verde a la financiación de Phesgo, una combinación de Perjeta (pertuzumab) y Herceptin (trastuzumab) a dosis fija con hialuronidasa, administrada mediante inyección subcutánea (SC) para el tratamiento del cáncer de mama HER2 positivo precoz y metastásico.

El cáncer de mama HER2 positivo es una forma particularmente agresiva de la enfermedad que afecta aproximadamente al 20% de las pacientesHasta ahora, este tratamiento se administraba por vía intravenosa y requería horas, frente a los minutos que representa la vía SC, manteniendo la misma eficacia. La vía SC es la preferida de los pacientes y profesionales sanitarios, y puede asociarse a una reducción de los costes sanitarios. Se trata de la primera formulación en oncología que combina los dos anticuerpos monoclonales, pertuzumab y trastuzumab, en un mismo vial para inyección SC.

Este tratamiento está disponible como un vial de dosis única para inyección SC y permite una administración más rápida que la intravenosa estándar de pertuzumab y trastuzumab. Su administración por vía SC requiere aproximadamente ocho minutos para la dosis de carga inicial y, aproximadamente, cinco minutos para cada dosis de mantenimiento posterior. Esto se compara con aproximadamente los 150 minutos que requiere la perfusión de una dosis de carga de Perjeta y Herceptin, utilizando las formulaciones intravenosas estándar, y entre 60 y 90 minutos de las perfusiones de mantenimiento posteriores de ambos medicamentos.

Tal y como ha señalado la doctora Beatriz Pérez Sanz, directora médica de Roche Farma España, “esta aprobación representa un importante paso adelante en el tratamiento de este tipo de cáncer de mama. La innovación que aporta permite reducir significativamente el tiempo que las personas pasan recibiendo la terapia estándar con pertuzumab y trastuzumab, contribuyendo potencialmente a minimizar el impacto que el tratamiento tiene en su vida diaria”.

En esta misma línea se manifiesta el doctor José Ángel García Sáenz, oncólogo médico del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, quien destaca que “gracias a esta nueva formulación, los pacientes pasan mucho menos tiempo en el hospital de día. No precisan estar mañanas o incluso jornadas enteras para recibir su medicación, algo muy importante teniendo en cuenta que deben acudir al hospital cada tres semanas para ello. A esto se añade que esta administración es menos invasiva y suele asociarse a menos riesgos frente a la vía intravenosa. Por explicarlo de una manera muy sencilla, es una manera de revertir una situación de enfermedad, haciendo sentir a estas mujeres menos enfermas”.

Por su parte, la doctora Eva Ciruelos, oncóloga médica de la Unidad Cáncer de Mama del Hospital 12 de Octubre de Madrid, hace hincapié en que “hay que tener en cuenta que el cáncer va a ser algo muy común en nuestra sociedad y, concretamente, el cáncer de mama, que es un tumor con más de 35.000 nuevos casos al año en nuestro país. Por lo que estos tratamientos tan prolongados es preciso que sean compatibles con el día a día de los pacientes, para que puedan ir a trabajar, cuidar de sus hijos o hacer las tareas cotidianas. Y para eso, sin duda, necesitamos que las terapias no solo sean eficaces, evitando que la enfermedad progrese, sino también que sean cómodas y que ayuden a conciliar la vida personal de los pacientes y, por supuesto, sin aumentar los efectos secundarios”.

Todo empezó hace 25 años

Hace 25 años, aproximadamente, los estudios con trastuzumab mostraron su eficacia para tratar a pacientes con cáncer de mama precoz, y para incrementar la supervivencia en aquellas con enfermedad avanzada. “Posteriormente -explica el doctor García Sáenz-, se vio que incorporar dos anticuerpos, es decir, añadir a trastuzumab pertuzumab, aumentaba la tasa de curación en etapas iniciales y la supervivencia y calidad de vida en aquellas con enfermedad metastásica muy avanzada. Esto supuso un hito en el manejo del cáncer de mama HER2 positivo. A partir de ahí, no hemos dejado de investigar y avanzar para curar a más pacientes o, al menos, prolongar la calidad de vida en aquellos casos en que la enfermedad no es curable”.

En este contexto, la doctora Ciruelos añade que “son dos fármacos, pertuzumab y trastuzumab, que ya estábamos utilizando y, precisamente, lo que permite la innovación es dar un giro a algo que ya funciona, añadiendo ventajas adicionales. Y es lo que se ha conseguido en este caso, más allá de su eficacia frente al tumor, que es lo que ya teníamos con la versión intravenosa”.

Estudio FeDeriCa

La aprobación se ha basado en los resultados del estudio fase III FeDeriCa, que demostró que el tratamiento con Phesgo producía niveles no inferiores de pertuzumab y trastuzumab en sangre, en comparación con la administración intravenosa de los dos medicamentos. Su perfil de seguridad, en combinación con quimioterapia, era comparable a la administración IV de pertuzumab y trastuzumab en combinación con quimioterapia. No se identificaron nuevas señales de seguridad, incluyendo ninguna diferencia significativa en la toxicidad cardiaca.

11 hospitales españoles han participado en los estudios clínicos que avalan la aprobación de esta nueva vía de administración. “La oncología española siempre está a la cabeza en investigación clínica y, gracias a la participación que hemos tenido en los ensayos con esta vía de administración, tenemos experiencia con este tratamiento subcutáneo, pese a que en España haya llegado tan tarde su financiación”, añade la doctora Ciruelos.

taller sexualidad femenina

Taller de sexualidad femenina y menopausia

El pasado sábado 17 de junio se celebró en Spai Fundació (Burriana) un taller de sexualidad femenina y menopausia, enmarcado dentro del proyecto de talleres saludables y solidarios organizados por Fundación Le Cadó.

El evento que se pudo realizar gracias a la participación de las profesionales del Servicio de Salud Sexual y Reproductiva de Burriana. Sumado a la colaboración de Diputació de Castelló, la Cátedra de Actividad Física y Oncológica de la UJI, GEICAM e INCLIVA.

Todo sobre el taller de sexualidad femenina

El taller giró en torno a la sexualidad femenina y la relación de las mujeres con la sexualidad a lo largo de las diferentes etapas de su vida, haciendo hincapié en la etapa de la menopausia.

Fueron Jessica Nogueira, Ginecóloga del Servicio de Salud Sexual y Reproductivo de Burriana, y Elvira Monferrer, Enfermera del Servicio de Salud Sexual y Reproductivo de Burriana, las encargadas de impartir este último taller saludable.

Ambas aprovecharon el taller de sexualidad femenina para naturalizar cada una de las etapas hormonales que las mujeres experimentan a lo largo de su vida. Así como para resolver todas las cuestiones relacionadas con la salud sexual femenina.

Además, dichas profesiones compartieron tanto su experiencia como profesionales del ámbito de la salud sexual como su experiencia como mujeres. Un discurso cercano y valorado gratamente por todas las asistentes, en su mayoría mujeres, que acudieron al taller.

Continúan los talleres saludables

Una vez más, las Fundación Le Cadó apuesta por la celebración de talleres saludables para todos los públicos sobre diferentes temáticas. Estos talleres, al margen de su gran labor informativa, ayudan a la fundación a difundir su labor solidaria.

Como en anteriores ocasiones, las asistentes acudieron al taller saludable con la intención de ampliar sus conocimientos sobre la salud sexual femenina; pero también con la voluntad de colaborar con la organización.

El objetivo de la Fundación Le Cadó es firme: recaudar fondos para la financiación de diversas investigaciones del cáncer de mama mediante su proyecto Flor de Vida. En la actualidad, la Fundación Le Cadó colabora con el INCLIVA, Instituto de Investigación Sanitaria, y la Cátedra de Actividad Física y Oncología de la Universitat Jaume I.

Dada la buena acogida de los talleres celebrados hasta el momento, la Fundación Le Cadó continuará con la celebración de sus talleres saludables. Busca así acercar la salud a la sociedad de la mano de expertos en la materia.

quimioterapia cáncer de mama

Aumenta el número de pacientes de cáncer de mama que pueden ser tratadas sin quimioterapia

Un tercio de las pacientes diagnosticadas de cáncer de mama HER2+ pueden ser tratadas con éxito sin quimioterapia, según un ensayo clínico internacional liderado desde España presentado en el congreso de la Sociedad Americana de Oncología Médica (ASCO, por sus iniciales en inglés) que se celebra en Chicago.

El estudio se enmarca en la tendencia de la oncología a tener cada vez más en cuenta la calidad de vida de las personas con cáncer sin comprometer las posibilidades de supervivencia a largo plazo, un campo en que el cáncer de mama está siendo pionero.

“El objetivo de supervivencia no es negociable. No sería aceptable una mayor calidad de vida a costa de una reducción de eficacia. Pero ahora disponemos de terapias que hace pocos años no teníamos y que en algunos casos pueden ser alternativas a la quimioterapia”, declara Javier Cortés, director del International Breast Cancer Center en Barcelona y Madrid, que ayer presentó los resultados del estudio en el congreso de Chicago.

El estudio se ha centrado en tumores HER2+, que representan entre el 15% y el 20% de todos los casos de cáncer de mama y que se caracterizan porque las células tumorales tienen una gran cantidad de receptores HER2. Cuando estos receptores se activan, envían al núcleo de las células la orden de multiplicarse, lo que favorece el crecimiento de los tumores. Pero hoy día se dispone de anticuerpos bloquean los receptores HER2 y frenan así la proliferación de las células tumorales.

Estos anticuerpos se introdujeron como complemento de la quimioterapia y hoy día se utilizan de manera habitual en el tratamiento de cánceres HER2+. Su alta eficacia “nos llevó a pensar que tal vez estamos administrando más tratamiento del que sería necesario a algunas pacientes, y que tal vez en algunos casos podríamos conseguir la misma eficacia sin quimioterapia”, declara Antonio Llombart-Cussac, jefe del servicio de oncología médica del hospital Arnau de Vilanova en Valencia, que ha dirigido la investigación junto a Javier Cortés.

En el ensayo clínico, que se inició en 2017, han participado 356 pacientes de siete países europeos. Todas habían sido diagnosticadas antes de que se produjeran metástasis y, por lo tanto, en un momento en que el cáncer era potencialmente curable.

Un tercio de las mujeres con cáncer de mama HER2+ pueden ser tratadas con éxito sin quimioterapia

El 20% fueron tratadas con quimioterapia antes y después de la cirugía tal como indicaban las guías de práctica clínica para el cáncer de mama HER2+. El otro 80% fueron tratadas con dos anticuerpos contra HER2+ pero sin quimioterapia, con la perspectiva de añadir quimioterapia más tarde si los anticuerpos no eran suficientes. En los casos en que sus tumores tenían receptores hormonales, además, recibieron terapia hormonal. Este diseño del ensayo clínico se eligió para poder comparar los resultados entre las pacientes tratadas con anticuerpos y las tratadas únicamente con quimioterapia.

Entre las 285 tratadas con anticuerpos, 227(el 80%) respondieron inicialmente al tratamiento, según se comprobó con una técnica de diagnóstico por imagen por PET. Después, al realizar la cirugía, se observó que quedaban células tumorales en 141 pacientes (el 49% de todas las tratadas con anticuerpos), por lo que se les administró quimioterapia. Las otras 86 (un 30%) tuvieron una respuesta patológica completa, lo que significa que no quedaba ningún rastro de tumor tras el tratamiento de anticuerpos.

Después de tres años de seguimiento, no se ha registrado ninguna metástasis entre las pacientes tratadas sin quimioterapia, según los resultados presentados en el congreso de Chicago. Solo una ha sufrido una recidiva localizada, que ha sido tratada y tiene buen pronóstico.

El 65% de las pacientes tratadas solo con quimioterapia han sufrido efectos adversos graves durante el tratamiento, frente al 13% de las pacientes tratadas sin quimioterapia.

“Estos resultados demuestran que podemos iniciar el tratamiento de todas las pacientes HER2+ sin quimioterapia, y añadirla posteriormente solo en los casos en que sea necesario, sin que esto afecte a sus perspectivas de curación”, declara Javier Cortés.

Esta tendencia a desescalar quimioterapia -la expresión que utilizan los oncólogos- se ha iniciado ya con los cánceres de mama HR+/HER2-, que representan alrededor del 70% de todos los casos de la enfermedad. En las pacientes en que el pronóstico en el momento del diagnóstico es bueno, el tratamiento se limita ahora en muchos casos a cirugía y terapia hormonal.

En cuanto al cáncer de mama triple negativo, que representa en torno al 15% de casos, hay proyectos en curso para valorar si las inmunoterapias y los innovadores fármacos ADC permiten reducir en un futuro el uso de la quimioterapia, informa Cortés.

Otros tumores en los que se están investigando tratamientos de desescalada de quimioterapia incluyen, entre otros, los de pulmón, cabeza y cuello y melanoma.

“A medida que disponemos de más opciones de tratamiento, podemos aspirar a aumentar la eficacia y reducir los efectos secundarios de manera individualizada para cada paciente”, señala el oncólogo. “La quimioterapia continúa siendo necesaria en muchos casos, pero hay otros en que podemos reducirla e incluso eliminarla”.

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recaída cáncer de mama

Llega a España un nuevo tratamiento contra el cáncer de mama que ayuda a combatir la recaída en los estados iniciales

Cada año se realizan unos 35 mil nuevos diagnósticos de cáncer de mama en España. El 93% se encuentra en estadios iniciales, pero aproximadamente una de cada cinco de estas pacientes sufrirá una recaída a lo largo de su vida. La farmacéutica Lilly ha presentado el nuevo fármaco ‘Verzenios’ (abemaciclib), que ya está disponible en España tras ser aprobado por la Agencia Europa del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) y que supone un hito para el tratamiento de los tipos de cáncer de mama HR+ y HER2- en estadios iniciales de alto riesgo, ya que reduce el riesgo de recaída en este tipo de cáncer un 33,6 por ciento a los cuatro años con tan solo dos primeros años de tratamiento.

Este fármaco, que se presenta como primer y único inhibidor de ciclinas para el tratamiento adyuvante del cáncer de mama HR+ y HER2-, también puede reducir el riesgo de metástasis en un 34,1 por ciento en el mismo periodo y mejorar la supervivencia libre de enfermedad invasiva, es decir, el tiempo que transcurre desde que una persona inicia el tratamiento y aparece la primera recaída de la enfermedad.

“Es el primer avance en casi 20 años para este grupo de pacientes para disminuir el riesgo de recaídas”, ha remarcado el presidente de Lilly España, Nail Daoudha. Además, ha resaltado que este nuevo fármaco ha tenido, tanto en “su descubrimiento inicial como en su desarrollo clínico, un protagonismo sumamente importante en España” ya que ha contado con la colaboración del grupo I+D de Lilly España en su investigación y desarrollo.

Tipo de tumor más frecuente

El cáncer de mama con receptores hormonales positivos (HR+) y HER2- es el tipo de tumor de mama más frecuente ya que afecta al 70 por ciento de las pacientes. Además, dentro de este grupo, el 15 por ciento tienen alto riesgo de recaer, tal y como ha explicado la oncóloga médica y jefa del Servicio de Oncología Médica del Hospital Basurto de Bilbao, la doctora María Purificación García.

Con respecto al tratamiento que reciben las pacientes con estos tipos de cáncer, la doctora García ha explicado que “el tratamiento de la quimioterapia seguido de la hormonoterapia es el tratamiento estándar de las pacientes de alto riesgo con cáncer de mama precoz con receptores hormonales positivos (HR+) o HER2 negativo (HER2-)”. Entre los principales factores de riesgo de recaída en cáncer de mama luminal, la doctora García ha resaltado la edad, la menopausia, el tamaño tumoral ya que, a mayor tamaño tumoral, mayor riesgo de recaída, la presencia de ganglios axilares y la expresión de los receptores de estrógenos y progesterona.

Este nuevo fármaco se presenta como tratamiento adyuvante para estas pacientes y se suministra por vía oral diariamente y tiene una toxicidad muy reducida. El mecanismo de acción se basa en inhibir las ciclinas dependientes de kinasas CDK 4 y 6, moléculas que potencian la división de las células tumorales. Gracias a ello, se fomenta que estas células tumorales sufran un envejecimiento prematuro y mueran.

Escasos efectos adversos

En relación con la adherencia, la doctora García ha resaltado que es importante “que las pacientes tengan facilidad de acceso a las consultas” así como “buscar fármacos y tratamientos menos tóxicos pero igual de eficaces”. En este sentido, otro de los beneficios de este nuevo fármaco es su perfil de seguridad como terapia oral ya que, debido a su baja toxicidad, se puede tomar de forma continua, sin necesidad de descanso, y no interfiere en el funcionamiento de la terapia hormonal.

Asimismo, este nuevo fármaco destaca por sus escasos efectos adversos y la no permanencia de estos, es decir, todos ellos son reversibles, previsibles, manejables y limitados en el tiempo. Según ha destacado el presidente del Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM) y jefe del servicio de Oncología Médica del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, el doctor Miguel Martín, entre los efectos secundarios que puede producir abemaciclib están la diarrea o la fatiga, entre otros, pero que “todos desaparecen el día que se interrumpe el tratamiento a los dos años y no dejan secuelas”.

Por tanto, el doctor Martín ha afirmado que “el balance riesgo-beneficio de este tratamiento es muy importante” ya que tiene “una toxicidad esencialmente gastrointestinal, que se puede tratar y desaparece al cabo de los meses”. “Es de las novedades más impactantes para el cáncer de mama de las que hemos visto en los últimos años”, ha sentenciado.

Financiado por el sistema nacional de salud

Con respecto a la financiación de este nuevo tratamiento, el presidente de Lilly España ha explicado que “se ha llegado a un acuerdo con el Ministerio de Sanidad” por lo que será una “financiación directa” que “maximice el acceso del fármaco a todos los pacientes”. Además, el presidente ha añadido que “el precio es un buen reflejo del valor del medicamento”.

La financiación de este medicamento por el Sistema Nacional de Salud (SNS), tras la aprobación de la EMA, se basa en los resultados del estudio ‘monarchE’, que ha demostrado que el inhibidor de ciclinas, en combinación con una terapia hormonal, reduce el riesgo de recaída un 33,6 por ciento a los cuatro años con tan solo dos primeros años de tratamiento. Un beneficio que se incrementa con el tiempo de seguimiento a los tres o cuatro años.

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avances mamografías

Más rápidas, más seguras y menos dolorosas: así son las nuevas mamografías

“El aparato es diferente y no me ha dolido tanto”. Esto comenta Julia (nombre ficticio) de su última revisión: fue diagnosticada de cáncer de mama hace una década y se somete a una mamografía anual. A la tensión de la incertidumbre se le sumaba el dolor que el aparato le provocaba al comprimir la mama. Pero cambió de centro, el aparato era distinto y se llevó una agradable sorpresa.

No es la única. “En mi hospital cambiamos el mamógrafo hace cinco años y empezamos a notar que las mujeres que venían a hacerse su revisión no se quejaban tanto: venían asustadas y quedaban sorprendidas“, comenta Myriam Montes, radióloga del madrileño Hospital Clínico San Carlos.

Ella misma subió un vídeo a su Instagram mostrando las ventajas de la nueva máquina. La antigua ya había cumplido más de 15 años de servicio pero en su momento también supuso una revolución: “Fue de las primeras digitales que llegaron a España”, explica a EL ESPAÑOL.

En estas últimas dos décadas, la tecnología para realizar las mamografías ha avanzado enormemente. Tanto, que según Montes, portavoz de la Sociedad Española de Radiología Médica, las guías europeas de cribado del cáncer de mama, que se basan en “ensayos clínicos que se hicieron hace 20 años”, han quedado algo obsoletas.

En la actualidad, el cribado del cáncer de mama está recomendado para todas las mujeres entre 50 y 70 años. Cada 24 meses, se realizan la prueba, colocando la mama en una plancha que la aplasta para tomar imágenes radiológicas de la misma. Más allá de la colocación, la prueba dura solo unos segundos, pero para muchas mujeres parecían eternos.

Los nuevos aparatos, que comenzaron a llegar a nuestro país justo antes de la pandemia, son capaces de conseguir mejores imágenes, de forma más rápida y con menos presión en la mama. Además, el nivel de radiación es menor.

Aunque el nivel de radiación para lograr una imagen mamográfica es mínimo y no entraña, por sí solo, ningún riesgo, siempre es recomendable reducirlo en la medida de lo posible. Al irradiar menos la mama, Montes ve una oportunidad para ampliar la edad de cribado de forma segura, sobre todo en mujeres jóvenes, que “son más susceptibles a la radiación porque las células se replican más rápido en los tejidos jóvenes”, lo que aumentaría –teóricamente– la probabilidad de aparición de mutaciones causadas por la radiación.

De hecho, la Comisión Europea recomienda bajar la edad de cribado a los 45 años (en EEUU es a partir de los 40) y así se hace en varias comunidades españolas, si bien el panorama es muy heterogéneo e incluso puede diferir entre provincias.

De igual forma, el número y tipo de aparatos de mamografía no es nada uniforme, lo que condiciona su uso, pero la radióloga apunta al gran cambio que ha habido en los últimos años con la renovación de los equipos tecnológicos en la sanidad pública. Gran parte de los hospitales cuentan ya con mamógrafos avanzados y ya no necesitan externalizar este servicio a otras clínicas, tanto públicas como privadas, de forma que “los mismos radiólogos que hemos visto la mamografía vamos a citar a la mujer para la biopsia y en el mismo hospital se puede realizar el tratamiento y el seguimiento”.

Las controversias de las mamografías

El oncólogo César Rodríguez apunta que la realización de mejores cribados permite detectar y tratar antes los tumores. “Esto se traduce, en líneas generales, en tratamientos menos agresivos y una mayor posibilidad de curación”.

Además, con el aumento de la esperanza de vida, se está planteando la posibilidad de ampliar la edad de cribado por arriba, hasta los 75 años. Por debajo de los 45, sin embargo, “no está demostrado que sea una técnica rentable: el número de mamografías necesarias para detectar un solo tumor sería muy elevado, su impacto es pequeño”. Solo se vigilan aquellas mujeres con más riesgo que la población general: las que tienen antecedentes familiares o predisposición genética, por ejemplo.

Por encima de los 70 se realiza en las que han pasado ya por un cáncer de mama, que acuden a revisiones de forma periódica (generalmente, una vez al año en lugar de los dos del cribado general).

Con todo, Rodríguez, que trabaja en el Hospital Universitario de Salamanca y es vicepresidente de la Sociedad Española de Oncología Médica, reconoce que, pese a mejorar en los diagnósticos precoces, “sigue habiendo controversia sobre el impacto del cribado en la población”. Aunque algunos estudios muestran reducción de la mortalidad por cáncer de mama, en este punto no hay una conclusión definitiva.

Mientras tanto, el avance de los equipos hace más agradable pasar por este proceso de forma periódica. Aunque la mayoría de mujeres en el rango de edad recomendado acude a hacerse la mamografía, la ‘amabilidad’ de los nuevos aparatos puede contribuir a eliminar reticencias.

Myriam Montes apunta que el boca-oreja contribuye a ello, “las mujeres están muy informadas”, y aunque la pandemia supuso un parón, se ha regresado a la normalidad. “Existe la típica frase de ‘si esto fuera para un hombre ya se habría avanzado‘. La realidad es que se ha avanzado muchísimo y ahora los mamógrafos tienen que comprimir menos para obtener una imagen diagnóstica de calidad altísima, mucho más nítida. Nos podemos adelantar a un diagnóstico de cáncer de mama años antes de que aparezcan síntomas”.

cursa de la dona Burriana

VII Cursa de la Dona en Burriana

  • La Cursa de la Dona 2023 en Borriana alcanza más de 1.200 participantes en su séptima edición
  • La “marea rosa” ha conseguido recaudar un total de 7000 euros que se destinarán un año más a la investigación para la lucha contra el cáncer de mama

La séptima edición de la Cursa de la Dona de Borriana celebrada hoy ha vuelto a superar todas las previsiones en cuanto a participación, ya que más de 1.200 personas se han dado cita a media mañana en la Piscina Municipal de la ciudad para tomar parte de un evento en el que ha vuelto a destacar el carácter solidario, y que han convertido la jornada en un modelo de sororidad, de unión y de reivindicación justa.

Gracias a la participación en la “marea rosa” de Borriana, con esta carrera solidaria coordinada por la Fundación Le Cadó se ha conseguido recaudar un total de 7.000 euros que se destinarán íntegramente, un año más, a proyectos de investigación para la lucha contra el cáncer de mama de repercusión nacional.

La cursa es un encuentro popular de 5 km de “solidaridad” a través del vial del Port hasta la zona marítima y vuelta hasta Borriana, en cuya organización colabora activamente el Servei Municipal d’Esports (SME) de Borriana, que ha organizado una vez más unas actividades físicas previas a la salida y al finalizar la prueba no competitiva.

Una jornada de sororidad, de estar unidas y de reivindicar causas justas alrededor, además de un día de reivindicación como es el Día Internacional de la Acción por la Salud de las Mujeres.

Antes de la salida de la cursa, representantes de la corporación municipal y de la Fundación Le Cadó han entregado dos cheques de los 7.000 euros recaudados al director de la Cátedra Actividad Física y Oncología de la Fundació José Soriano Ramos de la UJI, Eladio Collado y al representante del GEICAM para seguir financiando el proyecto de la CAFO-UJI e iniciar el proyecto EMBARCAM, Fundación Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama.

Además, durante los momentos antes al inicio de la cursa, se ha agradecido a todos los departamentos municipales implicados, a las entidades y empresas colaboradoras su compromiso social, así como el respaldo para seguir haciendo crecer cada año una Cursa de les Dones no competitiva que ya en su séptimo año ha aumentado la participación pasando de 400 el primer año a las más de un millar en esta edición.

La presidenta de la Fundación Le Cadó, Elvira Monferrer, ha mostrado su satisfacción por la “masiva participación” y ha destacado la “extraordinaria implicación de la sociedad burrianense”, que ha demostrado una vez más ser “generosa y solidaria con esta iniciativa” en la que colaboran de forma “muy proactiva”.

Las personas participantes que han completado la marcha hasta llegar a la línea de meta situada junto a la Piscina Municipal han podido disfrutar de los alimentos y refrigerios, y del reparto de los diferentes productos ofrecidos por las marcas colaboradoras en el evento.

Así, con las emblemáticas camisetas de color de rosa diseñadas por el burrianense Vicent Guerola, y la alegría de las más de mil mujeres y muchos hombres que se han dado cita en la Cursa de la Dona, se ha cerrado una nueva y multitudinaria edición que, muestra la fuerza y las ganas de las mujeres de nuestra ciudad por ser protagonistas de eventos sociales, como en este caso que une deporte y solidaridad.

embarazo cáncer de mama

Un estudio determina que parar la terapia endocrina para quedarse embarazada no eleva las recaídas en cáncer de mama

En mujeres con cáncer de mama hormonosensible que desean ser madres, pausar la terapia endocrina para intentar quedarse embarazadas durante un tiempo máximo de dos años no incrementa el riesgo de recaídas a corto plazo. Así lo avalan los resultados del ensayo clínico Positive, publicado en The New England Journal of Medicine, y coordinado en España por el Grupo Solti, de investigación clínica en cáncer, y por el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (Geicam).

Tras tres años y medio de seguimiento, los resultados, que ya que se avanzaron en el último congreso internacional San Antonio Breast Cancer Symposium 2022 (SABCS), muestran un riesgo de recaída en estas pacientes del 8,9%, frente a un 9,2% en pacientes que no pausaron la terapia en busca de un embarazo.

Positive es el primer estudio prospectivo diseñado para dar respuesta a mujeres que se diagnostican de cáncer de mama en edad temprana y sin haber completado su deseo de ser madres. Se estima que entre el 40% y el 60% de las pacientes a las que se diagnostica un cáncer de mama a los 40 años o antes están preocupadas por su futura fertilidad.

CÁNCER DE MAMA CADA VEZ MÁS FRECUENTE EN MUJERES JÓVENES

“Sabemos que el cáncer de mama es cada vez más frecuente en mujeres jóvenes y, por tanto, coincide con el deseo de ser madre de muchas de ellas. Por esta razón, fertilidad y embarazo resultan preocupaciones importantes tanto para las pacientes oncológicas como para los investigadores”, comprende Manuel Ruiz Borrego, co-coordinador del estudio Positive en España, miembro de la Junta Directiva de Geicam y jefe de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla.

Este nuevo estudio “abre la posibilidad de un embarazo seguro para aquellas pacientes con cáncer de mama que lo deseen, una vez que han realizado al menos 18 meses de terapia endocrina adyuvante”, señala Cristina Saura, coordinadora del estudio en España, miembro de la junta directiva de Solti y jefa de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Vall d’Hebron y VHIO.

Hasta ahora la recomendación era empezar a buscar el embarazo pasados un mínimo de 5 años tras haber superado el cáncer de mama, y siempre que no hubiera habido recaídas. Según la experta, los resultados de Positive “pueden cambiar las guías clínicas actuales”, pero advierte de que “el seguimiento a largo plazo de estas pacientes será fundamental para corroborar estos datos”.

El presidente de Geicam, Miguel Martín, que es además jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Gregorio Marañón, advierte de que “este estudio da tranquilidad a los médicos y pacientes que ya anteriormente se decidían a una interrupción de la terapia endocrina, después de al menos dos años, para permitir un embarazo”.

“Ya se sabía que el embarazo no empeoraba el pronóstico de las mujeres con cáncer de mama. También muchos oncólogos debatíamos con las pacientes la posibilidad de interrumpir transitoriamente el tratamiento endocrino para permitir un embarazo muy deseado y lo hacíamos, pero ahora hay evidencia prospectiva que apoya esa opción”, sostiene el oncólogo.

ASÍ HA SIDO LA PARTICIPACIÓN ESPAÑOLA EN EL ESTUDIO

Para examinar el impacto de la pausa de la terapia endocrina con el objetivo de buscar un embarazo, el estudio Positive incluyó a 518 mujeres de 42 años o menos, procedentes de veinte países, con cáncer de mama de receptores hormonales (RH) positivos que deseaban quedarse embarazadas.

De estas, 72 pacientes procedían de 18 hospitales españoles y fueron reclutadas a través de los grupos de investigación Solti y Geicam.Antes de pausar su tratamiento, las pacientes habían completado entre 18 y 30 meses de terapia endocrina adyuvante. Además, se instó a las participantes en el ensayo que reanudaran el tratamiento endocrino tras un intento de embarazo o un paréntesis de su tratamiento hormonal de dos años para intentarlo.

Los datos actuales surgen tras un seguimiento de 3 años y medio. No obstante, los investigadores continuaran el seguimiento de las participantes en el estudio durante 10 años.

Curiosamente los resultados muestran tasas de concepción y parto que están a la par o son superiores a las de la población en general; de 497 mujeres a las que se hizo seguimiento para ver si se habían quedado embarazadas, 317 dieron a luz al menos a un hijo y nacieron un total de 365 niños, debido a embarazos múltiples o consecutivos.

CÁNCER DE MAMA Y EMBARAZO

Positive se inscribe en una línea de investigación que busca dar respuesta a las cuestiones sobre salud reproductiva de las pacientes con cáncer de mama. Se investiga además si existe una relación de causalidad entre el embarazo y la aparición de un cáncer de mama.

Así, el estudio Embarazo y Cáncer de mama (Embarcam), liderado por Geicam, permitirá tener una foto del llamado cáncer de mama gestacional, diagnosticado durante el embarazo o el año siguiente, con el objetivo de prever esta situación y diseñar estrategias encaminadas a lograr embarazos seguros.

En esta línea se quiere determinar la utilidad de la leche materna para la detección precoz del cáncer de mama. “Con el estudio de casos concretos hemos concluido que la leche materna serviría para detectar mutaciones cancerosas de forma más precoz que a través de la sangre, por ser la concentración de ADN mucho más elevada en la leche materna”, afirma Saura.

“Para confirmar estos datos, prevemos poner en marcha MMaterna, un estudio internacional cuyo objetivo será analizar el caso de las mujeres que se embarazan siendo mayores de 40 años o siendo portadoras sanas de una mutación genética que aumente su riesgo de padecer cáncer de mama para ver si somos capaces de diagnosticar el cáncer de mama de manera más precoz en el postparto a través de la lecha materna que mediante las muestras de sangre o estudios radiológicos convencionales”, resalta.

taller saludable

Taller saludable: reconstrucción y aumento mamario

El pasado sábado 22 de abril se celebró en Spai Fundació (Burriana) un nuevo taller saludable y solidario a cargo de la Fundación Le Cadó. Un evento realizado en colaboración con el Hospital Clínic Universitari de València y la Diputació de Castelló.

El taller giró en torno a la cirugía del pecho, bajo el nombre: “Diferentes tipos de reconstrucción y aumento mamario”.

Fue el doctor Carlos Tejerina Botella, jefe del Servicio de Cirugía Plástica y Reparadora del Hospital Cínico de Valencia, el encargado de impartir el taller. En su presentación, Tejerina fue más allá de la mastectomía, y quiso mostrar las diferentes posibilidades que ofrece la cirugía del pecho en la actualidad.

Además, el doctor aprovechó la ocasión para hablar sobre su trayectoria profesional y su experiencia en quirófanos. En definitiva, el evento fue todo éxito. Los conocimientos del sanitario y su cercanía fueron capaces de captar la atención de todos los allí presentes.

Un nuevo taller saludable y solidario

Estos talleres llega más allá de lo informativo y dan a conocer la labor de la Fundación entre un mayor público. Hombres y mujeres interesados en apoyar la labor de la Fundación llegan a estos talleres con la intención de disfrutar de estos evento, pero sobre todo con la intención de colaborar con la organización. Cabe recordar que la Fundación Le Cadó recauda fondos para financiar diversas investigaciones del cáncer de mama mediante su proyecto Flor de Vida. En la actualidad, la Fundación Le Cadó colabora en diferentes investigaciones del INCLIVA, Instituto de Investigación Sanitaria, y la Cátedra de Actividad Física y Oncología de la Universitat Jaume I.

La Fundación continúa así el propósito que le impulsó a organizar estos talleres: acercar a la sociedad diferentes temáticas interesantes del ámbito de la salud de la mano de expertos en la materia.

mastectomía

El 80% de los casos de cáncer de mama se tratan sin necesidad de mastectomía

El diagnóstico precoz ha elevado al 80% los casos de cáncer de mama abordables con cirugía poco invasiva, sin necesidad de recurrir a la mastectomía. Esa es uno de los titulares que el hospital Reina Sofía dio a conocer este jueves en la segunda edición de unas jornadas organizadas para dar a conocer las novedades sobre estos tumores con motivo del Día Mundial, que se celebra el próximo 19 de octubre. La directora de la unidad de gestión clínica de Radiodiagnóstico del hospital, Marina Álvarez, destacó el interés del centro no solo por informar de los avances en diagnóstico y tratamiento sino por abrir el debate a la ciudadanía para conocer sus dudas, sus miedos y la incertidumbre que sienten en torno al cáncer de mama, el más frecuente en las mujeres, y a las pruebas que se realizan a las pacientes.

El aumento de los casos que no requieren mastectomía se debe al importante avance tecnológico en los sistemas empleados tanto en la detección como en el tratamiento de los tumores, detalló Álvarez. El trabajo multidisciplinar y coordinado de profesionales de distintas áreas también está contribuyendo a abrir cada vez más posibilidades de tratamientos más precisos y ajustados a cada paciente. «Cada vez tenemos más opciones terapéuticas a nuestro alcance y de lo que se trata es de estudiar cuál es la más adecuada a cada caso», incidió.

Entre las técnicas incorporadas en los últimos años destaca el uso de la inteligencia artificial para la detección de lesiones muy pequeñas, casi indetectables, que pueden indicar el inicio de un tumor o la incorporación de la mamografía con contraste, una prueba funcional que permite mejorar la detección de lesiones tumorales, ya que ofrece resultados más sensibles y precisos que la mamografía convencional.

En cuanto a los tratamientos, las técnicas de ganglio centinela o el uso de semillas magnéticas son algunos de los ejemplos de los que también se habló en el encuentro, en el que participaron radiólogos, oncólogos médicos, oncólogos radioterápicos, cirujanos, médicos nucleares, anatomopatólogos y enfermeros, entre otros, participaron en las dos mesas redondas organizadas por el centro. También hubo lugar para dar a conocer el lugar de trabajo de los profesionales gracias a una serie de vídeos grabados en las diferentes unidades del hospital.

Por su parte, el oncólogo del hospital Reina Sofía Juan de la Haba recordó que el programa de diagnóstico precoz se activó en el año 1999 y desde entonces, el volumen de mujeres que acceden a las mamografías periódicas se ha ido ampliando, lo que ha mejorado el diagnóstico precoz.

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tratamiento endocrino

Científicos de Granada demuestran el importante papel de la terapia endocrina en el tratamiento del cáncer de mama

El grupo de investigación de Oncología Traslacional e Integrativa del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada (ibs.GRANADA), liderado por Isabel Blancas López-Barajas y Sergio Granados, ha colaborado en la realización de un ensayo clínico internacional que ha demostrado que la terapia endocrina, combinada con un fármaco, utilizado en el cáncer de mama llamado Abemaciclib, supone un tratamiento de mayor seguridad y mejores resultados percibidos por las pacientes en el tratamiento del cáncer de mama de alto riesgo en sus etapas iniciales.

El cáncer de mama de alto riesgo con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, puede venir definido por distintos factores como estadios de presentación más avanzados, índices de proliferación celular más altos o altos grados de diferenciación celular.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

Este estudio internacional llamado MonarchE en el que participan investigadores del ibs.GRANADA, el Hospital Universitario Clínico San Cecilio y la Universidad de Granada, es un ensayo clínico en fase 3 en el que han participado casi seis mil pacientes de diferentes países. En este estudio se ha realizado un seguimiento de 27 meses comparando pacientes con terapia hormonal con y sin Abemaciclib, con el objetivo de observar los efectos adversos de ambas líneas de tratamiento.

En estudios previos ya se demostró en pacientes con cáncer de mama de alto riesgo con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, una mejora clínicamente significativa en la supervivencia libre de enfermedad invasiva con el tratamiento combinado de Abemaciclib con terapia hormonal, pero no se reportaba exhaustivamente la valoración de los tratamientos y de los resultados por cada participante en el estudio.

Además, este análisis ha contribuido a establecer con más precisión la seguridad del uso de Abemaciclib adyuvante a partir de los datos proporcionados por casi seis mil pacientes de ensayo, que recibieron al menos una dosis del tratamiento en estudio. Para ello, se analizó la incidencia de efectos adversos, su manejo clínico y el desenlace de los mismos, así como la calidad de vida percibida por las pacientes, teniendo en cuenta los síntomas experimentados y otras variables como el peso que tuvieron en su vida estos efectos adversos.

Una de las conclusiones más relevantes de este estudio, donde han participado investigadores del ibs.GRANADA, es que en pacientes con cáncer de mama de alto riesgo en su etapa inicial, con receptores de estrógenos positivos y Her-2 negativo, el tratamiento adyuvante combinando abemaciclib y terapia hormonal tiene un perfil de seguridad aceptable y buena tolerancia. Los resultados obtenidos muestran que combinar abemaciclib con la terapia endocrina, a pesar de que puede producir un aumento en la incidencia de efectos adversos, no implica que las pacientes sufran más complicaciones clínicas.

Todo esto, además, está apoyado por los resultados donde se evaluaba la percepción subjetiva del paciente que se manifiesta en todos los grupos de edad. A pesar de que los efectos adversos de este tratamiento, fueron mayores en el grupo que recibió el abemaciclib, se trató generalmente de problemas que solo se detectaron en las analíticas sanguíneas y que carecían de significancia clínica (como la elevación de las transaminasas o la neutropenia), que se pudieron revertir y gestionar utilizando medicación, reduciendo la dosis de abemaciclib o deteniendo temporalmente la administración del tratamiento.

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